Irma Perez, 14, éxtasis

Irma era una chica de 14 años de Belmont, California, que tomó una pastilla de éxtasis. Se sintió mal de inmediato (vomitaba y se contorsionaba de dolor) pero sus amigos no le buscaron ayuda médica. En vez de ello le dieron mariguana, pensando que la relajaría y que posiblemente podría ayudarla pues habían oído que posee propiedades medicinales. Irma sufrió durante horas. Cuando al fin la llevaron al hospital, a la mañana siguiente, se encontraba en terribles condiciones. Cinco días después le desconectaron el soporte vital y murió. Después de su muerte, donaron varios de sus órganos a cinco personas. 

¿Cómo murió Irma realmente? Los médicos forenses explicaron que su cerebro se hinchó por falta de oxígeno. Específicamente, se le disolvió el cerebelo mientras el cerebro trataba de escapar de su confinado espacio. 

La tragedia no terminó con Irma. Debido a que varios de sus llamados “amigos” estuvieron implicados en su muerte, fueron arrestados y llevados a juicio. Lo mismo ocurrió con el traficante que suministró el éxtasis. En total fueron acusadas cinco personas. 

Dos chicas de octavo grado se declararon culpables de dos delitos: proveerle una sustancia controlada a un menor y crueldad hacia un menor que le pueda causar daño o la muerte. El juez exigió que cooperaran con la oficina del fiscal del distrito en los otros juicios relacionados con la muerte de Irma, que asistieran a un programa de rehabilitación de ocho meses llamado GIRLS, que escribieran un ensayo de diez páginas sobre los peligros del éxtasis y que le enviaran una disculpa por escrito a la familia Perez. 

Un chico de 20 años, Anthony Rivera, admitió haberles suministrado el éxtasis a las amigas de Irma. Recibió una sentencia de cinco años en el Departamento Correccional de California. Él manejaba una red de drogas en la escuela media y le vendió éxtasis a un traficante de 17 años llamado Calin Fintzi, quien a su vez se lo vendió a las amigas de Irma. 

Calin y dos amigos suyos llegaron a la casa donde Irma y sus amigas habían tomado el éxtasis, y estuvieron ahí de las 2:30 a las 5:00 de la mañana. Él le dio a Irma agua y mariguana para ayudarla a pasar por su “mal viaje”. 

Angelique Malabey, de 18 años, fue sentenciada a seis meses de cárcel por haber ayudado a Rivera a ocultar las drogas después de que muriera Irma.