Jeremy Traylor, 18, OxyContin

(Proporcionada mediante el generoso apoyo de Prevención y Educación acerca de Sobredosis de Narcóticos [NOPE, por su sigla en inglés]) 

Siempre que Jeremy entraba a la sala, los que estaban en su compañía sentían su energía: una espontaneidad entusiasta. Era una persona inteligente y gregaria que siempre buscaba las mejores cualidades de las demás personas. Incansable y con un entusiasmo ilimitado que le habría sido muy útil en la vida. 

De joven, Jeremy podía simpatizar e identificarse con muchos tipos de personas y de personalidad. Tenía la capacidad de hallarle el gozo a casi cualquier actividad que él y sus numerosos amigos de la infancia pudieran descubrir. Esa cualidad lo atrajo a un grupo diverso de amigos y conocidos. Era inteligente y tenía muy pocos problemas para llevarse bien con sus compañeros. Casi siempre era el primero en apuntarse cuando se trataba de jugar o de participar en otras actividades de la infancia. Jugaba al soccer y al fútbol americano. Era excelente para el fútbol. 

Entre sus logros memorables está haber sido recomendado para el piano a los cuatro años y haber ganado una mención honorífica en la competencia de piano Northshore en Slidell. Otro de sus muchos logros memorables fue haber participado en una película de HBO. Pero sus logros más significativos fueron haber estado sobrio durante 80 días y graduarse después de una dura batalla contra la adicción al OxyContin; el 13 de mayo de 2009 se graduó en la secundaria Dutchtown. 

Jeremy fue buen estudiante en la secundaria y, en general, salió bien en sus cursos. Sus compañeros lo consideraban un buen escucha y sabían que cuando fuera necesario podían recurrir a él para hablar de prácticamente cualquier cosa. Los logros de Jeremy en la secundaria serían haber recibido un broche cada año por tener un promedio por arriba de 3.5 y finalmente, en su último año, haber recibido la chaqueta académica por haber tenido un promedio general superior a 3.5 en la secundaria. 

Con su talento de hacerse de conocidos fácilmente, lo que a su vez le producía una corriente interminable de amistades, Jeremy era muy sociable y podía mezclarse sin esfuerzo en cualquier grupo social. Enérgico y desenvuelto, era fácil de conocer y demostraba un profundo interés por los demás. Siempre parecía al tanto de lo que le estaba pasando a la gente que lo rodeaba y a lo largo de su vida hizo muchos, pero muchos amigos. 

Jugó al fútbol en su primer año en la secundaria. También fue un poco aficionado a los deportes y disfrutaba ver sus deportes favoritos siempre que tenía la oportunidad. En los primeros lugares de su lista estaban los Saints de Nueva Orleans y los Tigers de la Universidad Estatal de Louisiana. 

Pese a lo inteligente y adorable que era, su adicción al OxyContin pudo más que él. Una semana después de haberse graduado de secundaria, y de estar limpio y sobrio por 80 días, Jeremy cedió a la tentación de “solo una vez más” y volvió a tomar OxyContin. Esta vez pagó ese error con su vida. Murió el 20 de mayo de 2009.